Bajada de línea a los artistas de Xi Jimping y advertencia de que no deben ser esclavos del mercado

 

Publicado el diciembre 19, 2021

Escrito por Mario Gilardoni

Foto autor

Resulta interesante conocer el pensamiento y estrategias filosóficas que rigen en una sociedad con patrones muy divergentes de los que se aplican en el sistema occidental. Esto adquiere especial relevancia especialmente en el momento en que el mercado de arte chino se está desarrollando en forma explosiva, llegando a ocupar un puesto de liderazgo entre los principales países que tradicionalmente ocupan las posiciones de privilegio.

El presidente chino Xi Jimpíng, además de asistir a la inauguración del XI Congreso Nacional de la Federación China de Círculos Literarios y Artísticos y el X Congreso Nacional de la Asociación de Escritores Chinos, que se inauguró en el Gran Palacio del Pueblo en Beijing, pronunció un discurso donde presentó cinco esperanzas y «Cuatro deberes y cuatro no» a los trabajadores de la literatura y el arte, con las que marcó los lineamientos que establece el marxismo para esa actividad. Hizo hincapié en que la mayoría de los trabajadores de la literatura y el arte deben valorar su influencia social y considerar seriamente el aporte social de los efectos de sus obras. «Una obra literaria ¡si una persona tiene mala conducta, la gente no la aceptará y el tiempo no la aceptará!»

Xi señaló que durante los últimos 100 años el liderazgo del Partido Comunista Chino en el frente literario y artístico ha continuado explorando y practicando y se ha embarcado en un camino de desarrollo literario que está guiado por el marxismo a las condiciones nacionales y tradiciones culturales de China, y promueve el carácter del pueblo, que ha señalado la ruta a seguir para la prosperidad y el desarrollo de la literatura y el arte chinos.

Xi Jinping destacó las cinco esperanzas para los trabajadores de la literatura y el arte. El primero es centrarse en la gran causa del rejuvenecimiento nacional y describir con celo la magnífica atmósfera de la nueva era y el nuevo viaje. El segundo es apegarse al punto de vista del pueblo y escribir la epopeya eterna del mismo; el tercero es para adherirse a la integridad y la innovación, y utilizar las bellas obras maestras que se mantienen al día para abrir un nuevo reino de la literatura y el arte. El cuarto es contar la historia china bien con afecto y mostrarle al mundo de una manera creíble, hermosa e imagen respetable del país. El quinto es persistir en promover el camino correcto y lograr el valor de la vida en la búsqueda de la virtud y el arte.

Dentro de los cuatro no, destacó que la literatura y el arte deben ser populares, pero no vulgares, vulgares o kitsch; la literatura y el arte deben vivir, pero no deben convertirse en creadores, seguidores, o defensores de los malos hábitos. La literatura y el arte deben ser innovadores, pero no debe involucrase en cosas raras y sin pretensiones. La  literatura y el arte deben ser efectivos, pero no deben contaminarse con el hedor del cobre y ser esclavos del mercado.