El ojo certero. Dos piezas compradas por unos 600 dólares saldrán la venta con un estimado de 3 millones de dólares cada una
Publicado el febrero 5, 2023
Escrito por Mario Gilardoni

Al mejor estilo de los autos de colección hallados en galpones de campo, en un cobertizo de una granja estadounidense, Kinderhook, Nueva York, un coleccionista compró una pintura, en parte cubierta por excrementos de pájaros, y la pagó 600 dólares.
Lo que en realidad había adquirido es una pintura realizada unos 400 años antes. Se trata de un boceto ejecutado a los comienzos de su carrera por el pintor flamenco Anthony van Dick.
“A Sketch for Saint Jerome” es uno de los dos únicos estudios basados en modelos vivos conocidos de Van Dyck, probablemente creado entre 1615 y 1618, cuando el joven pintor trabajaba como asistente en el estudio de Amberes de Peter Paul Rubens. La obra captura a un anciano encorvado, su rostro en la sombra y su musculatura delgada finamente representada, una representación que sirvió como estudio para el San Jerónimo de Van Dyck (1618-1620), actualmente en poder del Museo Boijmans van Beuningen.
Autenticó su hallazgo en 2019, cuando la historiadora de arte Susan Barnes lo reconoció como una obra «sorprendentemente bien conservada» de Van Dyck. “El boceto al óleo”, escribió, “es un hallazgo impresionante e importante que nos ayuda a entender más sobre el método del artista cuando era joven”.
El boceto de Van Dyck, ofrecido a Sotheby’s por los herederos de Roberts, quien murió en 2021, se une a otras obras maestras europeas recién renovadas en la serie Old Master de la casa de subastas y ha sido estimada en 3 millones de dólares.
El otro hallazgo fue realizado en el negocio de un anticuario en Londres por un artista que sabía qué compraba por 700 dólares. Entre las numerosas piezas del negocio él distinguió un candelabro (una araña). El conocía de qué se trataba, ya que reconoció la pieza mandada a construir por un coleccionista amigo ya fallecido.
El encargo fue hecho al artista y diseñador Alberto Giacometti. Este candelabro poco común fue estimado por Christie’s para su próxima venta en 3 millones de dólares.