Hipnóticas imágenes de Jim Campbell en Fundación Telefónica

Publicado el julio 11, 2011

Escrito por weblatin

“Haikus visuales de la era de la información”. Así describe Bryce Wolkowitz, el galerista de Jim Campbell, los bellísimos trabajos del artista estadounidense que se exponen desde hace días en el Espacio Fundación Telefónica en una muestra que para la Argentina es completamente novedosa y poco habitual en lo que se refiere al arte que usa nuevas teconologías. Es difícil darles un nombre a las obras exhibidas: ¿videos, videoinstalaciones, instalaciones, esculturas lumínicas? Haikus visuales es un verdadero hallazgo.

Campbell (Chicago, 1956) y Wolkowitz conversaron con la prensa en la presentación de “Tiempo estático. Jim Campbell: 20 años de arte electrónico”, la muestra de este ingeniero electrónico y matemático del MIT (Massachusetts Institute of Technology) que produce el milagro de una obra cálida, emotiva y poética con circuitos electrónicos adaptados y LEDs (diodos emisores de luz) y que por el camino de la ciencia se ha convertido en uno de los artistas más vanguardistas de la actualidad.

Paradójicamente, Campbell les da a los LEDs un uso completamente opuesto al habitual: produce videos de muy baja resolución, con lo que la imagen y el.movimiento quedan reducidos a lo esencial. A tal punto, que por momentos las imágenes filmadas se vuelven abstractas. Caminando por ese límite entre lo abstracto y lo figurativo, explora las características del movimiento físico en figuras humanas y en la naturaleza, así como la memoria, el tiempo y el espacio.

Se exhiben unas veinte obras de diferentes épocas del artista, incluidas varias de la serie “Memory Works”, que aborda recuerdos personales y colectivos a partir de representaciones digitales.

Describir las obras de Campbell es una tarea destinada al fracaso. Sólo diremos que hacen posibles otras formas de la percepción y que destilan una rara poesía: por medio de sofisticadas tecnologías y modernísimas formas de registro y representación, revelan que las cuestiones esenciales son las mismas de siempre: el afecto, la respiración o el latido de las personas que amamos, el fuego, el movimiento, los recuerdos, la naturaleza, el paso del tiempo.