Importancia vs Poder en el mercado de arte. No se ponen de acuerdo
Publicado el diciembre 13, 2010
Escrito por weblatin
Desde hace años, los distintos mercados reciben «mediciones» que permiten analizar el posicionamiento y cambios anuales de los principales protagonistas de las distintas actividades económicas. Así se mide el comportamiento de bancos, industrias por sectores, finanzas etc., que se realizan y editan por acreditadas publicaciones de negocios como Forbes, Fortune, entre otras. Estos análisis tienen su apoyatura en evaluaciones de tipo estadístico, basadas en facturación, producción, evolución bursátil, etc. que dan como resultado distintos rankings de las 100, 200 o 1.000 empresas más importantes del año.
Como no podía ser de otra manera, el arte también tiene sus evaluadores, como Artnews, que acaba de dar a conocer el estudio que cada 12 meses elabora sobre los 200 coleccionistas más importantes. Si bien la metodología utilizada para llegar a estos resultados no es clara (algo familiar especialmente para los argentinos) ya que no hay elementos cuantitativos para medir. El sistema se basa en encuestas a personas, empresas e instituciones que son compiladas para llegar al listado final, pero que no explica los elementos que generan los ligeros cambios anuales.
Un ejemplo es la confrontación de los resultados de 2010vs.2009 donde sobre el total de 200 personajes se produce un relevo de unos 15 integrantes del listado, ligeras variaciones entre unos y otros en la escala. Cambios tan sutiles que resultan difíciles de interpretar.
Por ello no parecen extrañas las pocas coincidencias con otro estudio, en este caso de la británica Art Review, sobre las 100 personas más poderosas en el mundo del arte. Sólo encontramos 11 nombres repetidos en ambos listados. Esto no lleva a la conclusión de que los coleccionistas tienen tan poca relevancia en la distribución del poder en el mundo del arte (pese a que con su aporte económico son uno de los pìlares para sostenerlo) o los parámetros utilizados para medir estas encuestas tienen discrepancias metodológicas muy profundas.
Algunos de los nombres coincidentes en ambos trabajos (entre 300 alternativas) son las de los matrimonios de coleccionistas Ringier, Broad, Arnault, Zabludowicz, los individuales Agnes Gund, Dimitris Daskalopoulos, Charles Saatchi, Dakis Joannou, Victor Pinchuk, Eugenio López Alonso y Damien Hirst.
A manera de referencia y dado que no se dispone de otros datos, Trastiendaplus ha realizado un ejercicio para tratar aportar un ligero análisis de la información brindada por ARTnews.
Prácticamente no hay diferencias entre los miembros entrantes y los salientes del listado de los 200 coleccionistas. Ingresaron 8 norteamericanos, 6 europeos y un japonés en reemplazo de un venezolano que salió de este selecto grupo. También las actividades fueron similares con 4 afectados al ámbito financiero y otro tanto a los fondos de inversión, 2 a la construcción y 2 a la moda. Uno de los detalles que llama la atención -al igual que en el listado de los 200- es que no se reflejen en ellos la tan importante participación de los compradores orientales, como vienen sosteniendo los líderes de las subastas internacionales.
Una rápida clasificación de las nacionalidades que integran el grupo está formada por 108 norteamericanos (principalmente neoyorquinos o californianos); 75 europeos (13 alemanes, 14 ingleses, 9 franceses, entre otros; 7 orientales y 7 latinoamericanos (3 mejicanos, 2 venezolanos, 1 dominicano y 1 argentino. Curiosamente no encontramos ningún brasileño).
La presencia argentina está representada por Eduardo Costantini, que mantiene el puesto 34, pese a que no se registra en los últimos años una actividad descollante en la adquisición de obras.
Uno de los datos más interesantes que surge de este análisis es la rotunda participación mayoritaria de las colecciones orientadas al arte contemporáneo, con 84 menciones, que sumadas a otras que contemplan también el arte moderno determina que más del 50% tiene una preferencia por los lenguajes actuales.
Asimismo, llama la atención la baja participación de la fotografía, que solamente se menciona en once oportunidades -igual número que en 2009- pese a que se ha considerado a esta rama del arte como una de las de mayor crecimiento en los últimos tiempos.